NACIONAL 2 PEÑAROL 8
SUB 20
22/09/2019
La sub 20 en los hechos se despidió ayer de sus aspiraciones al título.
Y lo hicimos de la peor manera.
Perdimos desde la primer pelota hasta la última.
En cada tramo del juego, en cada faceta, estuvimos por debajo de nuestro nivel.
Ya en los primeros dos minutos, desde lejos, el rival remató dos tiros que fueron al arco y rechazó nuestro arquero.
En las pelotas quietas estábamos fuera de foco, no tomábamos las marcas y deambulábamos.
Desde esa fragilidad en la defensa no fue posible ser estable en el ataque.
Era evidente que nos faltaban los jugadores de despliegue, los de ida y vuelta, pero no pudimos disimularlo en nada.
Antes de los 3 minutos recibimos el primer gol.
La pelota entra mansa, pateada con dificultad, picando, por el medio del arco. Había surgido de un lateral en defensa de Peñarol, un ajuste tardío del jugador de segunda línea que igual llegaba a obstaculizar la finalización cuando el arquero y el cierre también fueron a esa pelota equivocadamente.
Un minuto más tarde otro gol en nuestro arco. Recepción clásica de pivot, giro hacia su lado fuerte y tiro abajo. Es cierto que la cancha estaba muy sucia y hacia dificil prenderse en la marca, pero la falla fue evidente.
Con la pelota nos costaba generar una secuencia de pases y evolucionar en el campo buscando buenos espacios para el uno por uno. De esa manera y con el equipo "parado" el que tenía el balón estaba muy limitado.
Taramasco apoyó a Borche y fue a buscar la devolución que lo dejaría de cara al gol. La jugada se ensució pero igualmente anotó.
Pero un gol que podía ser un envión anímico, no duró nada. Literal.
Un saque de arco a favor, presión muy alta del rival y bajamos la pelota. Suave y mal. La perdemos. Otro gol. En cinco minutos teníamos tres goles en nuestro arco.
No nos recuperamos más.
Ya habíamos tenido partidos malos, pero en base a la diferencia de calidad con los rivales se habían resuelto. En esas circunstancias siempre quedamos desconformes y siempre visualizamos que jugando así en un partido de riesgo podríamos tener dificultades. Y lamentablemente tuvimos razón.
No supimos en el camino corregir nuestros defectos.
El partido se complicaría más y lo terminaríamos sufriendo. En diez minutos el parcial era de cinco a uno. No salía nada y nos entraba todo.
El cuarto una pelota perdida en media cancha. Transición del rival en tres toques, todos los carriles ocupados. Gol. Repliegue pésimo, temporización nula.
Un balón perdido nuevamente en un uno por uno ofensivo, ellos la pasan como pide la jugada y nos definen en superioridad.
Los últimos diez minutos del primer tiempo seguimos jugando muy mal pero dejamos de recibir goles.
El entretiempo no pudo cambiarnos el chip. Mejoramos algo al inicio de la segunda mitad, lo que no era difícil comparado con la pobreza de la primera parte. Erramos dos o tres favorables, incluso una sin arquero.
Pero en defensa perdimos siempre.
Mala decisión. Salimos a cortar de último sin cobertura, nos pasan y rematan de lejos suave y es gol nuevamente.
Después un gol de cabeza inconcebible, un centro del arquero de Peñarol con el pie, nuestro arquero la pide, el cierre deja su marca, el pivot anticipa, y gol. Quedaría tiempo para recibir otro cachetazo ya con la tapa del partido puesta hace rato.
El equipo que propusimos no rindió. La táctica tampoco funcionó. La toma de decisiones fue pésima. En los robos ellos pasaban la pelota nosotros no.
El ala opuesta no se cerró nunca del lado del balón y con la pelota en posesión no dimos signos de seguridad en ningún jugador.
Una tarde para el olvido que nos debe dejar enseñanzas. Los partidos difíciles se preparan durante los partidos accesibles previos.
Goles:
Lucas Taramasco 1
Akim Rodriguez 1
No hay comentarios.:
Publicar un comentario